HERBERT CHAPMAN Y EL ARSENAL DE LA WM: EL PRIMER REVOLUCIONARIO DEL FÚTBOL MODERNO

Si hablamos de revolución en el fútbol, no podemos no mencionar al Arsenal de Herbert Chapman. El entrenador inglés produjo un cambio de paradigma en el fútbol entre 1920 y 1930 dirigiendo primero al Huddersfield y luego al Arsenal. La modificación que haría Chapman de la «Pirámide Invertida de Cambridge» marcaría época en Europa y el mundo, al desarrollar la denominada «WM» y el primer sistema de tres defensores.

Tras la Primera Guerra Mundial, en la cual fue empleado de una fábrica de municiones, y una sanción de dos años por parte de la FA cuando estaba ligado al desaparecido Leeds City, Herbert Chapman recaló en el Huddersfield y lo reformó para convertirlo en el equipo dominante en Inglaterra. Fue allí donde hizo sus primeras modificaciones al sistema dominante 2-3-5, pasando a un momentáneo 3-3-4. Fueron las primeras versiones de la línea de 3 defensiva y la primera vez que un entrenador se atrevía a retroceder al volante central a la altura de los dos fullbacks. Un estilo que se enfocaba en la solidez defensiva y que se ganó las primeras críticas de sus pares. El Huddersfield ganaría la FA Cup con este esquema, dos campeonatos de liga seguidos y uno tercero consecutivo en 1926 cuando Chapman ya se encontraba a cargo del Arsenal.

Cinco años fue la meta de Chapman. El entrenador inglés convenció a los dirigentes del cuadro «Gunner» que en en ese tiempo serían el equipo que dominaría en la isla británica. Chapman no solo fue un revolucionario táctico, también fue el primero en incorporar masajistas y fisioterapeutas en un equipo de fútbol. Abogó por el uso de luz artificial en los campos británicos y, tras su muerte, se aceptó la idea que en primera instancia le habían prohibido sobre la numeración de las camisetas. También demostraría su inteligencia publicitaria con la contratación en su llegada del puntero del Sunderland, Charlie Buchan a quien convirtió en su bastión ofensivo en sus inicios en el equipo londinense.

El Arsenal de Herbert Chapman se convertiría en uno de los primeros clubes en el mundo en desembolsar el monto que fuera necesario por un jugador para fortalecer al equipo. Para 1930, año en el que la «WM» de Chapman alcanzó su máximo esplendor, había realizado tres fichajes claves: el extremo derecho Jack Hulme, el lateral diestro Tom Parker y el delantero Jack Lambert. A ellos se sumaría además el escocés Alex James, un centro delantero neto que sería reconvertido por Chapman para jugar como un interior-armador.

La filosofía de Chapman en una frase: “El momento más oportuno para marcar un gol es inmediatamente después de repeler un ataque rival, porque los oponentes se quedan pillados en la mitad equivocada del campo”.

Perfeccionando la WM

La revolución de Chapman y la «WM» en el fútbol vino a modo de respuesta a una problemática que se les había presentado a todos los equipos: un cambio en la regla del offside en 1925 permitía ahora que solo hubieran dos jugadores entre el atacante rival más adelantado y el arco. Es decir, solo hacía falta el arquero y un defensor entre el «9» y la portería. Esto obligó a una reforma que Chapman supo ver a tiempo. Variantes que llevarían al Arsenal a dominar el fútbol inglés. La dominancia de este sistema se establecería en la final de la FA Cup que el Arsenal ganaría 2-0 al Huddersfield Town en Wembley.

Los fullback de la «Pirámide Invertida de Cambridge» se movieron hacia los costados para que el Halfback o mediocentro retrocediera su posición para ubicarse entre ambos, formando así la línea de 3 defensores. Es la primera vez que se introduciría el concepto de defensor central como tal. En el mediocampo, los volantes que jugaban abiertos en el anterior sistema se centrarían y formarían el denominado “cuadrado mágico” junto a los interiores-armadores de la zona ofensiva.

En cuanto al funcionamiento de este sistema, Chapman también se aventuraría a diferentes cambios de paradigma. El marcaje dejaría de ser zonal como con la «Pirámide Invertida», pasando a ser un marcaje individual pero manteniendo la posición. La labor de los interiores también cambiaría, ya que se transformarían en los jugadores más habilidosos dentro del terreno y capaces de conectar defensa y ataque; no al nivel que se les conoce hoy en día pero sí se buscaba un prototipo de jugador capaz de jugar asociativamente y habilitar en largo a punteros y centro delantero.

Sobre la faceta ofensiva, se fortalecería la imagen del «9» como un «tanque». Sería el encargado de recepcionar todo balón aéreo que le pudieran suministrar interiores y punteros, siendo muy escasa su participación fuera del área rival. En el Arsenal, sería Jack Lambert el jugador ícono de esta posición. Otros ejemplos serían el de Matthias Sindelar en la Austria que obtuvo el cuarto lugar en el Mundial de Italia 1938 y Ademir en el Brasil de la década del 40’ en la variante a la «WM» que bautizarían como «diagonal».

Los punteros también verían evolucionada su función dentro del terreno de juego en esta época. Ya no se trataba de jugadores que debieran recorrer la mitad del campo de juego única y exclusivamente pegados a la banda para centrar llegando a línea de fondo. Herbert Chapman fue el primero en dotarlos de libertad para generar diagonales hacia el pico del área para que pudieran rematar al arco rival o apoyar al «9» de área.

Sin lugar a dudas, uno de los grandes revolucionarios de la historia del fútbol fue Herbert Chapman. El estratega inglés falleció en 1934, sin embargo, su reinterpretación a la forma de jugar fútbol dominaría por al menos 20-25 años y sería replicado -con matices- casi un siglo después por el entrenador conocido como un «ladrón de ideas», Josep Guardiola.

*La "WM" de Chapman en faceta defensiva usada por el Barcelona de Guardiola ante Real Madrid.

La «WM» marcaría una época. Alemania la utilizaría en el Mundial del 34’ en el que acabaría en tercer lugar, Italia la replicaría en su título en 1938. El Dínamo de Moscú, un equipo que Stalin utilizaría como arma de propaganda política, introduciría su propia variante en el tour de 1945 que realiza por Inglaterra. En Sudamérica los ejemplos más destacados serían los de Brasil en la década del 40’ y del River Plate de aquellos años.

En una época donde los ingleses aún se sentían superiores al resto futbolísticamente, no se sabrá si el Arsenal que construyó Chapman podría haber dominado Europa completa (la Copa de Europa aun no nacía para ese entonces). Pero fue capaz de reinar en las islas en el período entreguerras, y cambiar la forma de interpretar el fútbol de la mano de un revolucionario. El fútbol moderno no puede entenderse sin entender a Herbert Chapman.

Escrito por: Camilo Vega | @CamiloAntonioVM 

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